Ayer cabildo de Cancún entregó 12 mil metros de playa pública a un particular a cambio de baños públicos, y ¿qué más?…

CANCÚN, MX.- En la Cuadragésima Novena Sesión Extraordinaria, el cabildo de Cancún finalmente entregó a Corporación Integradora de Servicios Administrativos, S.A. de C.V., empresa ligada a Televisión Azteca, casi 12 mil metros cuadrados de playa, a través de la aprobación del proyecto del Club de Playa Marlín, a cambio para la población, de unos baños con regaderas…

A unos días de que el presidente municipal de Benito Juárez, Julián Ricalde Magaña, deje su cargo, con el aval de todos los regidores, salvo el voto en contra de Sara Vázquez Estrada, concejal del PT, suplente de Lorena Martínez Bello, se aprobó un proyecto que estuvo “dormido” por años, pues implica despojar a la población de Cancún de una de las últimas playas públicas de la zona hotelera: Playa Marlín.

La concesión de 11 mil 882 metros cuadrados de playa a favor de Corporación Integradora de Servicios Administrativos, S.A. de C.V., la realizó el entonces alcalde priista, Francisco Alor Quezada (2005-2008), pero no se hizo efectiva sino hasta ayer por la noche, cuando el actual cabildo decidió aprobar el proyecto de club de playa que la empresa construirá en el espacio público, a cambio, de regaderas y baños para los bañistas locales que no puedan pagar para usar los camastros y las instalaciones del Club de Playa Marlin, y que seguramente, como ocurre con los espacios de los que se apoderan los particulares, se convierten en totalmente privados y sin respetar la zona federal marítimo terrestre.

El documento de la concesión aprobada en la administración de Alor Quezada, del 20 de agosto del 2007 estableció que la empresa Corporación Integradora de Servicios Administrativos le entregaría al ayuntamiento de Cancún 12 mil dólares mensuales que se destinarían al Sistema para el Desarrollo de la Familia (DIF), pero ello nunca ha ocurrido, y ahora ya no ocurrirá pues la administración perredista, en lugar de exigir el cumplimiento de la concesión, o rescindir la misma a través de su “brillante lobby de abogados”, “negoció” con la empresa y le perdonó la entrega de los recursos económicos para el DIF, a cambio de que instale baños y regaderas para uso público...

En julio pasado, en este espacio se publicó la nota que reproducimos a continuación, en la que se reconoce que no hubo, hasta ese momento, un acuerdo de cancelación del pago de los 12 mil dólares por parte de la empresa ligada a TV Azteca por el uso y explotación de la playa pública, lo que pudo haber ocurrido en alguna sesión de cabildo privada, pues la administración de Julián Ricalde es la que mayor número de sesiones privadas ha efectuado de entre todos los cabildo de Quintana Roo

  

Se hicieron los tontos, hasta el último, para entregar playa pública

En la solicitud de información 00133813 se requirió copia del proyecto que se pretende realizar en Playa Marlín, así como decir si la empresa está obligada a entregar una contraprestación económica al ayuntamiento por la concesión de 11 mil metros cuadrados de playa, y en qué consiste la misma.

El secretario general del ayuntamiento, Rafael del Pozo Dergal respondió que “el proyecto que se pretende realizar en Playa Marlín por parte de la empresa concesionaria, todavía se encuentra en proceso de conformación a efecto de que se dé cumplimiento a los lineamientos y especificaciones establecidos por el H Ayuntamiento (…) en la Trigésima Cuarta Sesión Extraordinaria de fecha 28 de noviembre de 2012 (…) (y) no hay fecha determinada aún para su presentación y aprobación definitiva.

Cabe destacar que la respuesta a la solicitud de información se entregó el pasado 20 de junio, y según el Secretario General, el proyecto aún se encuentra en proceso de conformación, es decir, la empresa concesionaria no ha acatado las modificaciones que el cabildo le solicitó en la referida sesión de noviembre del 2012…

En dicha sesión, además de que el cabildo aprobó ceder a la empresa Servicios Administrativos, S.A. de C.V., los derechos de la resolución en materia de impacto ambiental que la Delegación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales otorgó al Ayuntamiento de Benito Juárez; se aprobó que la concesionaria realizara varias modificaciones al proyecto técnico “en un plazo no mayor a 90 días contados a partir de la aprobación del presente acuerdo”; 90 días que por cierto ya pasaron.

Los cambios que el cabildo solicitó a la empresa fueron que se incluyan los siguientes elementos: estanque, jardines, cafetería/bar, bodega de playa y cocina; y se excluyan los seis locales comerciales, el área para tres despachadoras de refrescos y zona de comida rápida; dichas modificaciones son condicionantes de la expedición de la licencia de construcción respectiva, según se lee en el acta de cabildo de noviembre de 2012.

Además, el cabildo aprobó que la empresa está obligada a construir servicios como baños, vestidores y regaderas, a los que la población y los turistas tendrán acceso, de manera gratuita y sin limitación o restricción alguna.

Igualmente, la concesionaria deberá “administrar, conservar y proporcionar el mantenimiento que corresponda, de manera gratuita y permitir el acceso al público en general, sin limitación, restricción o retribución alguna”.

En la sesión de cabildo se estableció que “si la persona moral denominada “Corporación Integradora de Servicios Administrativos”, S.A. DE C.V. no cumple con la condición que se le impone, la autorización para modificar el Proyecto ejecutivo quedará sin efecto legal alguno, y sin necesidad de declaración por parte de este H. Ayuntamiento, y como consecuencia de ello se revocará la licencia de construcción que al efecto se haya expedido”.

"Olvidan" cobro de 12 mil dólares mensuales

El contrato de la beneficiosa concesión de 11 mil 882 metros cuadrados de playa, comprendida en los lotes 19, 19 A y 19 B, en el kilómetro 12.5 de la zona hotelera de Cancún, a favor de “Corporación Integradora de Servicios Administrativos”, se firmó el 20 de agosto de 2007, en el capítulo IV “Pago de Derechos”, en la cláusula novena se establecía que la “concesionaria se obliga a pagar al municipio de Benito Juárez, como contraprestación mensual de la presente concesión, la cantidad de 12 mil dólares o su equivalente en moneda nacional al momento de pago, cantidad que deberá ser cubierta de manera mensual y por adelantado ante la Tesorería municipal o en el lugar o institución bancaria que previamente éste le indique”

El pago de 12 mil dólares mensuales que se establecieron en el contrato original no ha sido revocado, como reconoció el propio secretario general del Ayuntamiento, Rafael del Pozo, en la respuesta a la solicitud de información referida al inicio de este artículo; sin embargo, la actual administración no se lo ha exigido a la empresa concesionaria.

Además según la cláusula Décimo Segunda, la empresa concesionaria otorgó “al momento de la firma del presente contrato una garantía de cumplimiento de todas y cada una de las obligaciones derivadas del presente instrumento, a través de la contratación de una póliza de fianza a favor del municipio”. NoticaribeNews obtuvo una copia del contrato, sin embargo, fue borrado el monto de la fianza que se supone entregó la empresa a la administración de Francisco Alor.

De acuerdo al contrato de concesión firmado en el 2007, es causal de revocación de la concesión, según el numeral I.- “cuando la concesionaria contravenga las obligaciones contenidas en el presente contrato”, y III.- “cuando la concesionaria no cumpla con las obligaciones económicas a que se refiere este contrato”.

Si la empresa no ha cumplido nada, por qué ningún alcalde perredista se atrevió a retirarle la concesión

El contrato de concesión contempla varios motivos para rescindir el mismo, y aunque la empresa beneficiaria ha incurrido de forma permanente en éstos, ningún presidente municipal de Benito Juárez se ha atrevido a siquiera intentar retirar la ventajosa entrega de casi 12 mil metros cuadrados a la empresa, que cada vez pide mayores beneficios para apropiarse y explotar por 30 años una playa pública.

Gregorio Sánchez Martínez, Latifa Muza Simón, Jaime Hernández Zaragoza y el actual edil de Cancún, Julián Ricalde Magaña tuvieron la oportunidad de cancelar la concesión a la empresa Corporación Integradora de Servicios Administrativos, S.A. de C.V., pero ni siquiera lo intentaron.

Fue el propio Rafael del Pozo, el que confió a esta reportera que la concesionaria era una empresa ligada a Televisión Azteca. Quizá sea esa la razón por la que priista Francisco Alor gestionó ante el congreso la entrega de la playa por 30 años; y por eso mismo, que ningún alcalde perredista se atrevió a intentar recuperar el espacio público; aún y cuando hay múltiples cláusulas que ha incumplido la empresa.

Curiosamente, la senadora perredista, Luz María Beristain, que ha protestó en Cancún y en la ciudad de México por la posible pérdida de la playa pública Delfines, sobre la entrega casi gratuita de Playa Marlin, ha guardado total silencio. (NoticaribeNews)