Realizan marcha en Puerto Morelos contra despojo de escuela junto al mar

Fabiola Cortés Miranda

CANCÚN, MX.-A las 8 de la mañana la gente empezó a reunirse en el kiosco de Puerto Morelos, madres y padres de familia, alumnos y maestros; algunos cargaban bloques, los mismos que llevarán y usarán para reparar una barda de la Escuela Federal Técnica Pesquera Numero 7 “Primero de Junio”, fundada en 1971 por Luis Echeverría; él mismísimo presidente de la república fue quien colocó la primera piedra en el predio donado por la familia Zetina; ahora más de 40 años después, el gobierno priista de Roberto Borge Angulo pretende despojar a las familias de Puerto Morelos del valioso predio donde estudian sus hijos; todo, porque se encuentra junto al mar Caribe.

El rumor es fuerte: que ya se vendió el predio. Que ya no hay marcha atrás. Que la traición al pueblo de Puerto Morelos está consumada, y avalada por un puñado de familias, los caciques del lugar, agrupados en una asociación mal llamada “Reivindicación de Puerto Morelos”; comentan algunas madres y padres de familia, que prefieren el anonimato porque conocen cómo actúa el gobierno represor.

Marco Antonio Pérez Flores, presidente de la Sociedad de Padres de Familia, reconoce en su discurso, en el plantel de la escuela que él ha recibido amenazas, al igual que el director de la escuela, Mario Humberto Alvarado Villarreal, pero advierten, que no los amedrentan, que continuarán su lucha. Un amparo obtenido apenas hace unos días por los padres de familia, en contra de la desocupación de la escuela, les da una esperanza para seguir enfrentando a las autoridades, al secretario de Educación, José Alberto Alonso Ovando, quien el martes pasado dejó plantados a los padres de familia, porque simplemente no quiere dar respuestas, porque no sabe qué contestar, dice Pérez Flores.

La marcha contra el despojo

Alrededor de las 8:30 alrededor de un centenar de personas ya está lista para manifestarse, llevan pancartas en las que reclaman frenar el despojo, en las que exigen que la tradicional secundaria que ha dado cobijo a decenas de generaciones no sea movida de su sitio.

La banda de guerra de la escuela encabeza el contingente. Saben de la seriedad del asunto y se comportan a la altura. Suenan las trompetas y las percusiones retumban, van llamando la atención a su paso, de extranjeros residentes en el poblado que apenas se están desperezando, de trabajadores que se asoman de los pequeños hoteles del pintoresco pueblo, de los restaurantes que están abriendo sus puertas.

La marcha parte de la plaza de Puerto Morelos, rumbo a la avenida Javier Rojo Gómez, y de allí, avanza unos cien metros y regresa para recorrer otros 200 metros y llegar al plantel de la Escuela Federal Técnica Pesquera Numero 7 “Primero de Junio”.   

Allí, Marco Antonio Pérez Flores, el presidente de los padres de familia, maestro en Ciencias del Instituto Politécnico Nacional (IPN) hace el anuncio: ya tienen un amparo para frenar momentáneamente el despojo; con aplausos, expresan los asistentes su optimismo.   

El director del plantel, Mario Humberto Alvarado, agradece la participación de los habitantes de Puerto Morelos y les pide no dejarse llevar por el rumor de que ya se vendió el predio, porque la intención es desanimarlos; anuncia que hasta ahora han reunido unas 3 mil 500 firmas para exigir que la secundaria no sea reubicada.  

Por los estudiantes, habla Giovanni Coral, un adolescente que tiene claridad sobre la importancia de la lucha social, que pide a los asistentes que inviten a más personas y “no dejar que nos pisoteen; recuperar lo que es nuestro; no permitir que nos quiten nada”, expresa el estudiante.

De entre la gente sale una mujer de avanzada edad que pide el micrófono, de aspecto frágil pero con una convicción inquebrantable, es Doña Zenaida Zetina, hermana del hombre que donó a la comunidad el terreno para edificar la escuela:   “este terreno fue donado por mi hermano, Susano Zetina Gasca, yo estuve aquí cuando Luis Echeverría puso la primera piedra, estaba mi hermano, estaba Don Nassim Joaquín; tengo una foto y se las voy a mostrar”, expresa Doña Zenaida, quien desaprueba que ahora el gobierno pretenda despojar al pueblo del terreno que su hermano le regaló al pueblo. La escuela tiene 42 años dando servicio, recuerda la mujer, quien actualmente tiene un nieto estudiando en el plantel educativo.

La presencia de Doña Zenaida representó otra bocanada de esperanza para los pobladores, que saben de la cercanía de la familia Zetina con el gobierno priista, y que no han escuchado un pronunciamiento de apoyo de parte del hijo de Susano Zetina, el donador del predio, porque la donación, al parecer, no cumplió con las formalidades legales.   

         

Algunos otros pobladores como Andrés Juan Cevallos son más contundentes en sus discursos, el padre de familia critica la ausencia de las autoridades locales: “¿dónde están las autoridades?”, cuestiona; “ellos no son cabezas, son maniquís”, expresa.

A la marcha también asistió la diputada federal del PRD, Graciela Saldaña, quien asegura que está gestionando un encuentro con el Secretario de Educación para que le informe de la situación del predio y las intenciones del gobierno, dice.

Las mañas del gobierno, y las evasivas de José Alberto Alonso Ovando

Hasta ahora no hay ninguna respuesta de parte de las autoridades, específicamente del secretario de educación, José Alberto Alonso Ovando, mucho menos una intervención o una “mediación” del presidente de la Comisión de Derecho Humanos del estado, Harley Sosa, como afirmó el funcionario. La incertidumbre es lo que prevalece, la intención de desgastar al movimiento, de cansarlos.

El martes pasado, José Alberto Alonso se comprometió a presentarles a los padres de familia un informe de la situación en la que se encuentra la escuela, así como las razones técnicas y dictámenes que “expliquen la necesidad” de cerrar el plantel; pero el funcionario no llegó a su cita, lo que ha provocado un mayor encono entre los padres de familia.

Sin embargo, atrás, a espaldas de los portomorelenses,  los funcionarios priistas siguen maquinando el despojo. Su reciente ardid ha sido ya no matricular a alumnos en la Escuela Federal Técnica Pesquera Número 7 “Primero de Junio”, y así justificar el cierre de la escuela por falta de alumnos: “a los alumnos que están saliendo de primaria, ya no los canalizan a nuestra escuela, les dan ficha para una escuela de ‘nueva creación’, la cual aún no existe; nos enteramos que la Semarnat apenas dio el permiso del cambio de uso de suelo; pero desde hace un mes empezaron a tirar el monte”,  explica Pérez Flores. 

Además desde el 2008 el gobierno ya no ha destinad recursos para la mejora y el mantenimiento del plantel. Literalmente están dejando caer la escuela para pretextar una urgente reubicación.

Otro frente en pos de apropiarse del predio lo está abriendo una asociación llamada “Reivindicación de Puerto Morelos”, quienes promueven el cambio de uso de suelo para el terreno en el que se encuentra la secundaria, y que ahora es de equipamiento: “son los caciques que se han tomado las atribuciones de decidir por el pueblo, presentaron un Plan de Desarrollo Sustentable y quieren cambiar usos de suelo”, detalla el Maestro en Ciencias del IPN.

Entre los planes también está reubicar el kinder y la primaria, que también ocupan predios cercanos al mar. Se trata de un despojo para vender los codiciados terrenos y dejar a los pobladores refundidos en zonas alejadas del centro. Privatizar el disfrute de las playas; dejarlo sólo para quien pueda pagarlo.

Héctor Sandoval Magallanes, padre de familia, confirma que cuentan con una lista de 120 alumnos que saldrán de sexto de primaria, a los que las autoridades ya no les permitieron inscribirse a la secundaria pesquera Primero de Junio, “los mandaron a una escuela de nueva creación, que no existe ni se sabe cuándo va a existir, porque la inmobiliaria Villas Morelos (de Isacc Hamui) ha dicho que no tienen un terreno ubicado para escuela; y (Alonso) Ovando responde con evasivas. Atrás de esto solo hay intereses económicos y políticos, unos cuantos quieren enriquecerse.

Algunas madres de familia que prefieren que su nombre no se publique, exponen su molestia ante lo que llaman “el engaño del gobierno”; “creen que somos tontos, ofenden nuestra inteligencia con su falta de respuestas”. Algunos extranjeros naturalizados, cuyos hijos asisten a la secundaria, también se unen a la protesta, no entienden cómo el propio gobierno pretenda quitarles la escuela, y refuerzan la demanda del director, Mario Humberto Alvarado: Puerto Morelos necesita no que le quiten una escuela, sino que le den otra más. (NoticaribeNews)