Presume diputado del PRI libertad de expresión en QRoo. Se olvida que un periodista maya está en la cárcel por hacer su trabajo

Fabiola Cortés Miranda

CIUDAD DE MÉXICO.- El diputado del PRI, Raymundo King de la Rosa, llamó a conferencia de prensa en la Cámara de Diputados para refutar lo dicho por la legisladora del PAN, Alicia Ricalde Magaña, sobre la clonación de la revista “Luces del Siglo”, al que calificó como un tema “ya muy trillado”.

En algo coincido con el legislador, el tema ya está muy trillado, aunque no por ello deja de ser grave; además de que son inaceptables y delirantes de locura las acusaciones que se hacen a través de los oficialistas periódicos Respuesta y Quequi en el sentido de que los propios directivos de Luces del Siglo, financiados por diputados de oposición, han clonado la revista para hacer parecer al gobernador Roberto Borge Angulo como “el tirano de la película”.

“(…) hay información sesgada, donde no hay elementos de prueba en ninguna de las imputaciones señaladas contra el gobernador Roberto Borge Angulo, queremos nuevamente reiterar ante los medios de comunicación un tema ya muy trillado, sobre si hay alguna clonación, sobre si hay alguna intervención de alguna autoridad judicial,  sí la ha habido, pero éste ha dado sentencia definitiva en la que no hay ninguna implicación del gobernador Roberto Borge”, aseguró Raymundo King.

Primera mentira

Primera gran mentira del abogado Raymundo King, egresado hace algunos años de una escuelita de Derecho chetumaleña. Sobre este tema “ya muy trillado” no existe “sentencia definitiva”; se resolvió un incidente pero a los directivos de la revista aún les quedan recursos sobre el amparo promovido.

Segunda gran mentira

Aunque la mentira más grande de Raymundo King fue cuando aseguró que “al contrario, (están dadas) todas las garantías a la libertad de expresión y al ejercicio periodístico en el estado de Quintana Roo”.

King de la Rosa “se olvida” de un tema que no está para nada trillado y que es varias veces más grave que el de la clonación de una revista, que, es cierto, ha vivido de los jugosos convenios con el gobierno del estado, ayuntamientos y dependencias; decía pues, que el Diputado priista no quiere recordar la mayor agresión que se ha dado en el gobierno de Roberto Borge Angulo a la libertad de expresión, y es el encarcelamiento del periodista maya Pedro Canché Herrera, actualmente procesado por sabotaje. Una situación sin precedente en el país entero, un caso inédito.

Tercera vez que miente

Raymundo King tiene oficio para eso de los desmentidos que parecen verdad pero que son mentira. El 23 de septiembre pasado, cuando la diputada de Movimiento Ciudadano, Luisa María Alcalde Lujan, llevó el caso de Pedro Canché a la Cámara de Diputados, el muy solícito diputado priista dijo que el detenido enfrentaba un proceso judicial con todas las garantías, y además, que no era periodista. Seguramente para King de la Rosa entre las garantías está la de recibir golpizas en la cárcel…

En esa ocasión, tildó el caso de “cortinas de humo” y pidió a Luisa María Alcalde “no pronunciarse con informaciones que pretenden llamar la atención desinformando a la ciudadanía”: “no se vale crear cortinas de humo y venir aquí a llamar la atención desinformando a la opinión pública con acciones con las que lo único que se ha procurado es mantener el orden social en Quintana Roo y que en ningún momento se ha tratado de hostigar ni limitar el ejercicio periodístico de cualquier gente o medio que se tenga”, replicó el diputado priista.

Raymundo King obtuvo un título de abogado, pero ello no quiere decir que sepa algo de leyes, porque si hubiese estudiado, no tendría dudas de que la detención y el encarcelamiento de Pedro Canché se dio violando sus garantías y sobre todo, sin ningún elemento con el que se pueda encuadrar el delito de sabotaje; ninguna conducta que pueda tipificarse como tal.  

Pedro Canché es un preso político, cuyo único atrevimiento ha sido denunciar a través de las redes sociales las condiciones que viven los indígenas mayas de Felipe Carrillo Puerto, el año pasado, enfrentó una ardua batalla contra las autoridades de salud para pedir que se tomaran medidas contra el dengue, enfermedad  que cobró la vida de dos de sus familiares. Pero la gota que derramó el vaso, fue video grabar el plantón que decenas de personas sostuvieron en las oficinas de la Comisión de Agua Potable de Felipe Carrillo Puerto, y de último, enviar, a través de un video, un mensaje y una invitación al gobernador Roberto Borge para sostener un debate con él sobre la situación de los mayas en el municipio de Felipe Carrillo Puerto.

Pedro Canché publicó el video en su canal de You Tube el 24 de agosto de 2014 y una semana después, el 30 de agosto, fue detenido acusado de sabotaje, tras la supuesta declaración de algunos detenidos del plantón de la Comisión de Agua, en el sentido de que el periodista había financiado a los que mantenían el bloqueo de las oficinas. Para pronto, Pedro Canché, como la mayoría de indígenas mayas, vive una situación precaria, de pobreza; de dónde iba a sacar miles de pesos, como aseguró en su momento el procurador Gaspar Armando García Torres para “financiar” un plantón. La única persona que recibió dinero para ir a Felipe Carrillo Puerto, pero no para participar en el bloqueo, fue Marisol Ceja, amiga de Pedro a quien le dio 100 pesos para su pasaje.

Pedro Canché es la mayor evidencia del hostigamiento y la represión que sufren los periodistas independientes en este estado, a pesar de ello a Raymundo King no le importó mentir a los representantes de medios nacionales diciendo que en Quintana Roo “(están dadas) todas las garantías a la libertad de expresión y al ejercicio periodístico”

¿Quién es Raymundo King?

Pero qué le va a importar a Raymundo King mentir, si se atrevió a hacerlo como funcionario.

Para los que no lo conocen y para los que ya no se acuerdan, Raymundo King de la Rosa fue nombrado por el entonces gobernador Félix González Canto, titular del Registro Público de la Propiedad cuando el joven ni siquiera había terminado la carrera de Derecho, por lo tanto no tenía título, lo cual restaba formalidad a todos sus actos registrales, o lo que es lo mismo, estaban afectados de nulidad. Por esa razón, Raymundo King fue “renunciado” de su cargo como registrador; y de allí fue enviado como director al Consejo Estatal de Población.

Este es el diputado del PRI, funcionario patito, que hoy se atrevió a decir a los representantes de los medios de comunicación que las acusaciones contra Roberto Borge “son infundios, han sido calumnias, y han sido difamaciones”.

Aquí está Diputado una prueba de lo que no es un infundio, ni una calumnia ni una difamación: el encarcelamiento del periodista maya Pedro Canché Herrera, víctima de la represión de un gobernador intolerante a la crítica.