Indigna feminicidio de estudiante en Cancún. Convocan a marcha para este domingo

Fabiola Cortés Miranda

CANCÚN, MX.-Por duro que se escuche, ojalá la muerte de Karen Carrasco Castilla sirve de algo. Ojalá sea ésta la gota que derrame el vaso en Cancún, donde, sin temor a equivocarme, el índice de feminicidios por número de habitantes supera al Estado de México, donde recientemente se emitió la alerta de género para varios municipios.

Ojalá sea la comunidad universitaria la que despierte la adormecida consciencia de los cancunenses; la indiferencia injustificable.

Los feminicidios en Cancún ya han sido muchos, pero lo peor es la impunidad, es ésta la que ha permitido que se sucedan uno y otro y otro; porque los victimarios al final se salen con la suya. Pocos asesinos de mujeres han sido detenidos, y ningún procesado ha sido juzgado con la severidad que amerita la situación.

“Esto te paso por puta”, pintó Jesús Antonio Pasos Pérez, en una pared de la recámara donde mató a martillazos a su esposa Ana Laura Marín Espinoza, en julio de 2013. En la habitación de al lado dormían los pequeños hijos de la pareja.   

En septiembre de 2013, el Juez Primero Penal le dictó al homicida una condena de solo 20 años de prisión. El caso no se tipificó como feminicidio. De acuerdo al artículo 89 bis del Código Penal de Quintana Roo, a quien cometa el delito de feminicidio se le impondrán de 25 a 50 años de prisión. El Juez desdeñó que se tratara de un asesinato por razones de género, a pesar de la pinta en color rojo dejada por el agresor…

Si esto sucede en los casos en los que existen evidencias tan contundentes, cuál es la justicia a la que pueden aspirar las víctimas y sus familias.

El Gobierno de Quintana Roo se ha negado a clasificar los múltiples asesinatos de mujeres como feminicidios por razones de imagen.  En las estadísticas que la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) ha proporcionado a través de la Unidad de Transparencia, no existe ni un solo registro de feminicidio, y por lo tanto, los jueces no han consignado a nadie por feminicidio, en este estado de mujeres asesinadas.

En el 2012, el procurador “maquillador” de cifras, Gaspar Armando García Torres, declaró en entrevista con la que esto escribe, que ‘los feminicidios no eran una situación preocupante’,

“(…) allí no estamos, afortunadamente, en una situación preocupante, de hecho no hablamos de un tema de feminicidios aquí, hacemos un recuento de homicidios dolosos de mujeres, es decir, muertes violentas de mujeres que no son propiamente en el panorama de feminicidios”, expresó en ese momento el Procurador.

Y fue congruente. A él nunca le preocuparon los feminicidios…

Una mecha que no termina de prender

En abril de este 2015 se encendió ya una primera mecha que no llegó a prender en la protesta y la exigencia al gobierno de Roberto Borge para que atienda el grave problema de los asesinatos de mujeres.

Fue el feminicidio de María Fernanda Vargas Sánchez, una niña de 13 años, brutalmente ultrajada, la que sacó a las calles a familiares, amigos y algunos ciudadanos. De entonces a la fecha, se contabilizan por lo menos una decena más de feminicidios. En mayo de este mismo año, un mes después del asesinato de María Fernanda, una niña de cinco años de edad fue salvajemente violada y golpeada. La menor fue dada de alta del hospital semanas después con una discapacidad de por vida. En ambos casos, los ataques siguen impunes…

No nos cansaremos de repetir que del 2011 al 2013, 214 mujeres en Quintana Roo fueron asesinadas de forma violenta. Las cifras actuales son inciertas, porque la Procuraduría no las registra, las manda al rubro de “otros delitos” donde se pierden, se difuminan.

214 mujeres muertas en tres años para una población de alrededor de 650 mil mujeres que habitan en Quintana Roo es la cifra más alarmante que pueda haber en el país. Lo increíble e inaceptable es la complicidad entre el gobierno estatal, el federal, los medios de comunicación, y la sociedad misma; con su indiferencia ante tal barabarie.

214 muertes intencionales y violentas de mujeres en tres años, equivale a que cada 5 días una mujer pierde la vida en este “paraíso” caribeño,  principalmente en Cancún. Si eso no es un dato estremecedor, ¿cuántas mujeres y niñas muertas necesita el gobierno de Roberto Borge para tomarse en serio este problema?; repito, retomando un cuestionamiento que desde hace meses dejé por escrito.

Todos tenemos que salir  a marchar

La muerte de Karen Carrasco sí debe ser la gota que derrame el vaso en el incontenible número de feminicidios en Quintana Roo, por eso, todas y todos debemos participar en la marcha programada para el próximo domingo a las 4 de la tarde.

La concentración es convocada por los estudiantes de la Unicaribe, donde Karen estudiaba. Saldrá del Malecón Américas y llegará al Palacio Municipal. (NoticaribeNews)