Las encuestas no sirven para nada, salvo si se pide el teléfono de los encuestados…

 Fabiola Cortés Miranda

Las encuestas no sirven de mucho, menos si las hace un periódico en lugar de una empresa especializada en sondeos de opinión pública. Es el caso de la que realizó Publicidad Impresa del Sureste, editora del diario Por Esto, y que tiene poca o nula experiencia en la materia.

Hacer encuestas no es cosa de salir con un lápiz a pescar incautos, es algo más complejo que eso, y si no, recordemos a María de las Heras (qepd), presidenta de Demotecnia, la única encuestadora que pudo determinar casi con exactitud el resultado de la elección federal pasada; pues mientras prácticamente todas las agencias demoscópicas y periódicos dieron una ventaja de 20 puntos a Enrique Peña Nieto sobre Andrés Manuel López Obrador, la encuestadora de María de las Heras estimó una ventaja de sólo 7.8 puntos, siendo el resultado real, el día de las elecciones, de 6.6 puntos.

Pero, bueno, la señora María de las Heras, para empezar, estudió Actuaría en la Facultad de Ciencias de la UNAM, o sea, los números eran su especialidad, ni más ni menos; y durante varios años coordinó el Sistema de Opinión Pública del PRI; participó también con el PSOE cuando ganó las elecciones José Luis Rodríguez Zapatero; y además estaba casada con el diputado César Augusto Santiago. Es decir, María de las Heras tenía no sólo los conocimientos científicos y técnicos, sino el feeling político; cosas que pocas veces se ven juntas.

Todo esto dicho, sólo para reafirmar por qué la encuesta realizada por Publicidad Impresa del Sureste no es ni un leve reflejo de los números que se registrarán en la jornada electoral del 7 de julio.

Y lo afirmo no porque tenga otra encuesta en la mano, sino por mera inferencia, distinta de lo que es la especulación.

Para mí es casi claro que Cancún es un territorio negociado, y como lo dije en otro artículo de opinión, la negociación se dio entre Roberto Borge, Jesús Zambrano, y Julián Ricalde, quien al final, todo parece indicar, se quedará con sólo un fundo: Isla Mujeres, como también lo comenté el 20 de mayo pasado.

Mexicanos al grito de torta  

El PRI sí está haciendo todo lo posible por ganar, no en términos positivos, sino como lo ha sabido hacer desde que surgió como partido, a través de la violencia contra sus opositores y de la compra de votos, a sabiendas de que en este país se venden votos hasta por una torta. Porque como mexicanos, hay que tener algo en la sangre para salir de noche-madrugada, como lo hicieron los cientos de habitantes de Puerto Morelos, de la colonia Zetina Gasca, para que, igual que lo hacen los delincuentes, seamos partícipes de un delito. No es la pobreza lo que más ha afectado a este país, es el conformismo y la mediocridad. Antier, por una despensa, por un electrodoméstico, los vecinos de Puerto Morelos amedrentaron a quienes tomaban fotos para dejar constancia del delito electoral promovido por el PRI para llevar al triunfo a su candidato, Paul Carrillo.

Esas personas, que en este país, por cierto, son muchas, son fieles a un sistema corrupto que les permite hacer y deshacer; ganarse la vida como sea, hasta sin trabajar, y no hay mejor representante de ese sistema que el PRI, porque lleva años practicándolo.

Entonces, más allá de las encuestas, sobre todo de las no están hechas por profesionales, hay que usar el sentido común.

Paul y Graciela, igual de malos

En Cancún hay dos candidatos principales; los dos igual de grises, igual de cuestionados tanto por su desempeño personal como profesional, los dos son unos soberanos “nadie”. Ni de Paul Carrillo ni de Graciela Saldaña se puede decir algo destacable en términos positivos, nada…

En esas circunstancias ganará quien pueda ponerle más dinero a la campaña, quien pueda comprar más votos, como sucedió en el 2012, cuando Andrés Manuel López Obrador, se negó a llevar a cabo la misma estrategia del PRI, según sé de buena fuente, y no quiso entrar a la competencia de comprar votos.

Aquí, tanto el PRI como el PRD caminan por el mismo sendero, ambos han comprado votos y se han acusado de hacerlo, pero no se comparan los recursos que pueda destinar el ayuntamiento de Cancún para tratar de comprar simpatías para Graciela Saldaña, que el dinero de que dispone Paul Carrillo, proveniente de las arcas del estado.

Así que, aunque será menor el margen, del estimado por la encuesta del Por Esto, en Cancún ganará el candidato que compre más votos…

También estoy segura que Alejandro Luna, del PT, no se quedará sólo con el 6 por ciento que le asigna el sondeo, porque se trata, prácticamente, del único candidato que tiene lo que no se compra en la esquina: empatía con la gente.

La mayoría de municipios quedará en manos del PRI

Como Benito Juárez (Cancún) es el municipio que interesa a nivel nacional por su significación económica y simbólica, pues de los demás ni para qué decir mucho. Salvo que, desde mi punto de vista, la mayoría quedarán en manos del PRI.

Solidaridad (Playa del Carmen) seguirá siendo del PRI, aunque Orlando Muñoz que va por el PRD, sin ser perredista, no se conformará con el 7 por ciento que le da la encuesta difundida. En Tulum las cosas no están dichas, ya que Armando Ventre está muy cerca de David Balam, más cerca de lo que los propios priistas ven o quieren ver; así que ese 6 por ciento que le da Publicidad Impresa del Sureste es más que equivocado.

Othón P. Blanco (Chetumal) se quedará en manos del PRI, a pesar de la pésima administración de Carlos Mario Villanueva, quien debería estar igual que su padre e igual que el gobernador Roberto Borge, en la cárcel, por los descomunales desfalcos que han hecho del erario público.  Lo mismo que Cozumel, donde hay un candidato apenas conocido, Roberto Olán; y uno que está acompañado por toda la estructura priista: Freddy Marrufo; archiconocido por su estirpe, y cómplice en las transas del ex gobernador Félix González.     

El PRD está en riesgo de perder los municipios mayas por una razón muy evidente: la alianza “de facto” que enfrentó a los militantes.

En Playa del Carmen, por ejemplo, resultó tan fatal, al grado de que de haberse mantenido la izquierda unida y con un candidato sólido, podría haber dado dignamente la batalla para quedarse con el municipio de Solidaridad; en lugar de venderle los puestos a la familia de la Lady Senadora, Luz María Beristain y a otros oportunistas del PAN.

En fin, ya falta poco para ver cómo termina la tragicomedia dirigida por Roberto Borge y los hermanitos Ricalde.

Lo que sí es casi una garantía es que el abstencionismo será, creo yo, histórico, porque, literalmente, no hay para donde arrimarse: del lado de los corruptos que roban, desvían recursos e incendian autos, encabezados por el PRI y Roberto Borge Angulo; o del lado de los cínicos que salen en cadena nacional llevándose fajos de billetes de la máxima oficina del municipio, sin inmutarse, y que andan libres, sabidos de la impunidad negociada, representados por Julián Ricalde.

Para pasados de..., los del IEQROO

Lo que sí no tiene nombre, es lo que hizo el Instituto Electoral de Quintana Roo (IEQROO), al mando de Jorge Manríquez Centeno, quien entregó la encuesta realizada por el diario Por Esto al periódico oficialista Quequi, para que éste la difundiera antes que el dueño del trabajo lo hiciera.

Con justa razón Por Esto dedicó hoy una nota al IEQROO y a sus cómplices presidente y consejeros, quienes si ya han caído bajo con su parcialidad, están anticipando que son capaces de caer aún más bajo.

Las encuestas donde piden teléfono

Si usted vive en Playa del Carmen, tenga cuidado de un grupo de adolescentes y jóvenes, sobre todo mujeres, del equipo de Mauricio Góngora, candidato del PRI a la presidencia municipal, quienes aplican encuestas, y le piden su número telefónico.

Con camiseta rosa en la que se ve una M en forma de Corazón y se lee el nombre de Mauricio Góngora, las jovencitas le piden datos personales, para realizarle una tendenciosa encuesta.

¿Para qué quieren su número de teléfono? Para recordarle que vaya a votar por el PRI el día de las elecciones, eso se lo puedo asegurar, claro, bajo la promesa de algún beneficio…ay usted sabe.